> Miguel Garví, escritor: agosto 2016

lunes, 29 de agosto de 2016

CAMINANTE, ¿HAY CAMINO?



Cuando el camino que transitamos se convierte en senda angosta, apenas un sendero de herradura, así es la sensación que se tiene conforme pasan los días y los problemas se agudizan, por la más mínima falta de entendimiento entre los representantes que nos hemos dado por medio de la urnas. El sentimiento de tiranía se refleja a cada momento que pasa.

Hace unos días, el 26 de Agosto se cumplió el 227 aniversario de la proclamación en Francia de los derechos del hombre y del ciudadano. 227 años, más de dos siglos han transcurrido y hoy en España, casi seguimos como en Francia hace 228 años. Si alguien ha tenido la curiosidad de leer esos pocos artículos, habrá descubierto como yo, cual es nuestra realidad, hoy, en el año 2016, en el siglo XXI.

Todo es esa declaración es sublime, pero dos de sus artículos nos dejan en evidencia a los españoles. El artículo 2º dice “La finalidad de los partidos políticos es la proteger los derechos naturales e inalienables del hombre, el derecho a la libertad, a la legítima propiedad y a la resistencia a la tiranía". ¿Se dan esas circunstancias en España? Los partidos políticos, sean del color que sean, ¿nos protegen? ¿Somos legítimos dueños de nuestras propiedades? O ¿estamos en manos de alcaldes tiranos que nos amenazan con quitarnos nuestras propiedades? ¿Podemos ofrecer resistencia a la tiranía de esos políticos que han salido de la nada? Sin duda España no firmó esa Declaración de derechos del hombre y del ciudadano.
Pero su artículo 4º tiene aún menos desperdicio: “La libertad nos faculta para poder hacer todo aquello que no perjudique a los demás”. ¿Se comportan así nuestros políticos? O, ¿solo miran su propio bien o el de su partido?

 ¡Qué lejos estamos de alcanzar la democracia en España. 


HOY ENTREVISTA CON, NIEVES JURADO


Nieves Jurado Martínez es una escritora de Albacete nacida en 1967. De profesión Educadora ambiental. Ha realizado talleres de teatro, escritura creativa y poesía en la Universidad Popular de Albacete. Es socia fundadora  del Club de escritura “La biblioteca” que organiza desde hace cuatro años el Certamen de Microrrelatos “Sucedió en la feria”, único concurso literario sobre la Feria de Albacete. Actualmente imparte talleres de Escritura Creativa en la Universidad Popular de Albacete y es coordinadora de varios clubes de lectura (en concreto tres) en la Biblioteca Pública del Estado de Albacete.  
A lo largo de los años ha ido poniendo el foco en la animación a la lectura, orientada, sobre todo, a los adolescentes, que cosa tan bonita y tan importante, y fomentando los talleres de escritura creativa, en las diferentes bibliotecas, clubes de lectura infantil, así como colegios e institutos. 
Poseedora de numerosos premios desde el año 2004, ha publicado “Jana y el misterio de los libros secretos” que fue elegido libro de lectura en los cursos de 1º y 2º de ESO en varios institutos y que ya va por su quinta edición. También cuenta con numerosas colaboraciones y ediciones colectivas con otros escritores. 
¿Qué es lo que le gusta a Nieves? Escribir, leer, compartir buenos momentos con sus amigos, escapar de vez en cuando de la rutina para recorrer y vivir la magia del Camino de Santiago. 


No ha tenido inconveniente en hacerme un hueco en su ajetreada  actividad literaria para contestar algunas preguntas que, seguro, serán de interés para sus lectores. 

¿A dónde vas a buscar tus historias, donde te inspiras? 
Las historias pueden estar en cualquier parte, sólo hay que saber observar, escuchar y leer mucho. Todo entra en el cerebro, se mezcla con lo que ya hay dentro y se almacena. Así, poco a poco, echándole mucha imaginación y trabajo, ese conglomerado de ideas sale en forma de relatos o novelas. Normalmente no espero a la inspiración, mejor voy a buscarla yo para que no se pierda. 

¿Cómo y dónde se deben de leer tus libros? 
En cualquier parte. La lectura no tiene un lugar fijo. Se trata de abrir el libro y leer.  

¿Tus historias tienen un trasfondo social? O por el contrario ¿Te gusta crear el fondo de la historia? 
Mis historias tienen de todo. Pero me gusta mucho la fantasía, que es el género de mi novela. Busco que los jóvenes, al leerla, pasen un rato divertido, que disfruten de la lectura, se emocionen con los personajes y se unan a ellos como si fueran uno más. Si mi libro les engancha, les divierte y les despierta las ganas de buscar y leer otras historias, me doy por satisfecha. 


Tus personajes cobran vida. ¿Te llegan a influir, de alguna manera, en tu vida personal? 
No. Mis personajes están al margen de mi vida personal. Cuando escribo me introduzco en sus vidas, en sus mentes, y dejo de ser yo. 

¿Y después del último libro, qué proyectos hay? 
Me gustaría poder sacar, entre otras cosas, la segunda parte de Jana. En eso estoy, pero al ser una novela autopublicada es muy difícil. Y por supuesto, seguir impartiendo algún taller de escritura creativa en la Universidad Popular, continuar con los clubes de lectura y organizar alguna actividad para el invierno con el Club de escritura.  

¿Qué novela de las que hay escritas te hubiese gustado escribir y por qué? 
Muchas, la verdad. Pero están bien así, me gusta aprender de los maestros.  

¿Cómo escritora, cómo ves el panorama literario español? 
Lo veo muy activo, aunque la calidad de algunos deja mucho que desear. Hay mucha gente que escribe, no sé si demasiada, y con internet es mucho más fácil llegar al lector. Todos los que escribimos en serio, no como un simple pasatiempo o moda, queremos llegar arriba, pero pocos lo consiguen. Sólo los mejores permanecerán en el tiempo y seguirán siendo admirados y leídos.  

¿Y la situación cultural de Albacete? 
En Albacete hay muchos escritores y buenos. En realidad hay bastante gente que se mueve en el terreno cultural e intenta sacar adelante, con mucho esfuerzo, diversas actividades, unas veces salen bien y otras no tanto. Pero creo que sí hay muchas ofertas culturales y muy interesantes. Aunque siempre se puede hacer más y mejor. 

Y para terminar esta primera fase: una recomendación a los lectores, que seguro leerán esta entrevista. 
Yo como lectora leo mucho y de géneros muy variados. Y eso recomiendo, que intenten dale una oportunidad a aquel género que nunca leerían, o que piensan que no les va a gustar. Que busquen y se atrevan con cosas nuevas. En la variedad está el gusto. 


En esta segunda parte de la entrevista, me gustaría tocar el plano personal, para que te conozcan un poco más tus lectores. 

¿Cuándo y dónde escribes? 
Intento escribir todos los días. Lo hago en mi casa, en una habitación que tengo para mí, con mi ordenador y llena de libros de todo tipo. 

¿Tienes manías a la hora de escribir, como algunos escritores? 
No muchas, la verdad. Supongo que el haber escrito con un par de niñas cerca de mí me ha hecho adaptarme bien al entorno. Me gusta escuchar música y, ahora que mis hijas ya son mayores, me va fastidiando más que me interrumpa cualquier cosa o persona. Pero nada más. 

¿Existe el folio en blanco? 
         Si. Y existe el temido miedo al folio en blanco. 

¿Qué le pedirías a una editorial? 
Que apostara por gente nueva, y por nueva no me refiero sólo a la gente joven. En la escritura puede ser nuevo, o que no haya sido publicado por una editorial, una persona mayor o joven. 

¿Prefieres ser publicado o autopublicado? 
Mi novela es autopublicada. Hoy en día es muy difícil que una editorial apueste por alguien desconocido. Pero cuando yo hablo de autoedición me refiero a publicarlo solo, directamente en la imprenta, no con una editorial a la que hay que pagar para que te publique o hacerlo en coedición. Si la editorial quiere publicar que apueste por el autor, no que le saque el dinero. Yo decidí apostar por mi libro Jana y el misterio de los Libros Secretos, y por eso me animé y me arriesgué a autopublicarla. La edito y la distribuyo yo sola, y con escasos recursos. He trabajado mucho por esa novela tanto para darla a conocer como para hacerme un hueco entre tantos y tantos títulos sacados por editoriales. Me han cerrado muchas puertas y me han ninguneado, pero yo he insistido. A los adolescentes que la leen les encanta, y me lo dicen así cuando voy a los institutos a encontrarme y charlar con ellos. Mis lectores son sinceros, si a los niños no les gusta un libro lo dicen y si les gusta mucho también. Por ello, tras mucho pelear, he llegado a sacar la quinta edición. Hay que creer en uno mismo, y si su trabajo vale, llegará la recompensa.  

Eres una escritora de literatura fantástica.  ¿Te has planteado escribir sobre otro género? 
Yo escribo de muchos géneros y temas. De hecho mis relatos no son de género fantástico juvenil como la novela, aunque sí es verdad que muchos tienen un toque irreal, pero no infantil. El terror me atrae mucho. También tengo relatos más realistas o denuncia social. 

¿A tu juicio, que debe tener un libro para que enganche al lector? 
Esto es muy difícil. Cada lector es un mundo. Creo que lo fundamental es escribir un buen inicio, ahí está la clave para enganchar al lector. También pienso que es importante el tipo de lenguaje que se use. Lo recargado no engancha mucho. Algunos creen que por escribir recargado y lleno de palabras supuestamente cultas y poco usadas, el texto está mejor escrito y es más “literario”, yo pienso que esto es un error. En la sencillez está la elegancia. Y no hablo de sencillez como lenguaje pobre, ni mucho menos. 

¿Cuáles son en tu opinión, los tres libros que no deben faltar en una biblioteca? 
¿Sólo tres? Me parecen pocos. ¿Quién soy yo para elegir tres de entre los grandes maestros de la literatura? Aunque El Quijote, la Iliada, Antonio Machado y Lorca, pienso que no deberían faltar, entre las muchas grandes obras literarias que existen y que se deben intentar tenerlas, y sobre todo leerlas, todas o gran parte de ellas. 


Pues hasta aquí la entrevista que hemos mantenido con la escritora Nieves Jurado. Muchas gracias por habernos dedicado estos minutos y esperamos que sirvan para tus lectores te conozcan mejor. Muchos éxitos con tus proyectos. 










lunes, 22 de agosto de 2016

HOY ENTREVISTA CON FRUTOS SORIANO



Frutos Soriano Fernández, nació en Albacete en 1960. De profesión bibliotecario de la Universidad de Castilla la Mancha. Casado y con dos hijos. Compagina su trabajo con la escritura y la interpretación de teatro en la compañía EA TEATRO de Albacete, de la que también es autor de alguna de las obras representadas.
Mantiene una intensa actividad literaria, formando parte de la asociación de la gente del Kaiku de Albacete, de la cual es presidente y del grupo la Confitería.
Es autor de obras como Gárgolas, Willbook (Historia de un Lum),  Haikus del parque, Vuelve Shane, Diarios de un holgazán, coordinador del libro No son falaguerías, Un viejo estanque, Poca cosa.
Autor también de obras de teatro como Becquer en Wyoming, La taberna francástica, Nana de la niña mala.
Ha tenido el detalle de hacerme un hueco en su apretada agenda laboral y literaria para contestar algunas preguntas que, seguro, serán de interés para sus lectores.

¿Dónde vas a buscar tus historias, dónde te inspiras?
En mi propia vida, principalmente en las relaciones familiares. Estas están en el origen de obras como ¡Vuelve, Shane!, Bécquer en Wyoming,  y El deshielo en Cicely. En el caso de los haikus, obviamente, la inspiración la encuentro en la Naturaleza.

¿Cómo y dónde se deben de leer tus libros?
Los libros de haikus, mejor leerlos pausadamente, a ser posible en épocas tranquilas, para poder paladearlos sin prisa. El verano es una buena época. Para mis los libros de prosa vale cualquier momento, ya que mis cartas y artículos son breves y pueden leerse de un tirón. 


¿Tus historias tienen un trasfondo social? O por el contrario ¿Te gusta crear el fondo de la historia?
No toco apenas el tema político-social, aunque he de reconocer que en los últimos años, y sobre todo a partir de la crisis y el 15-M, me ocupo y me preocupo (como le sucede a casi toda la gente) mucho más de la actualidad del país y del mundo. Esto puede apreciarse en algunos poemas de El deshielo en Cicely (“Los mercaderes”, “Recortes”, etc), así como en la columna radiofónica que durante dos años mantuve en el programa de Radio Chinchilla “El catalejo”.

Tus personajes cobran vida. ¿Te llegan a influir, de alguna manera, en tu vida personal?
Pues sí, claro está. Sobre todo los personajes teatrales, como el pistolero Gustavo Adolfo Bécquer de “Bécquer en Wyoming” o los dos personajes femeninos de “Nana de la niña mala”. Llevar a la escena personajes que han estado bullendo antes en tu mente es una experiencia intensísima y sorprendente, ya que cobran una vida propia que sobrepasa la voluntad del autor.


¿Y después del último libro, qué proyectos hay?
Ahora estoy embarcado en un libro titulado “Sucedió en Chinchilla”, una recopilación de testimonios, anécdotas y chascarrillos chinchillanos. En este caso no soy el autor del libro (aunque sí introduzco en él algunos textos míos) sino el recopilador y ordenador del material. Chinchilla (el pueblo de mi familia paterna) siempre es una de las vías creativas que exploro.

¿Qué novela de las que hay escritas te hubiese gustado escribir y por qué?
Muchas, pero diré “Madrid 1606”, de los albaceteños Eloy Cebrián y Francisco Mendoza. También la segunda parte, “Madrid 1616”. Dos novelas entretenidísimas sobre Cervantes, El Quijote y Shakespeare, en las que se aúna de forma espléndida la documentación y un ritmo que atrapa al lector.

¿Cómo escritor, cómo ves el panorama literario español?
En poesía mis preferencias se centran en Eloy Sánchez Rosillo y Luis Alberto de Cuenca. Como novelista me gusta mucho la facilidad para escribir y la pasión de Pérez Reverte. 


¿Y la situación cultural de Albacete?
En contra a lo que muchos dicen, no veo a Albacete como un páramo cultural, sino al contrario. Y, para demostrarlo, citaré solo algunos nombres de escritores albaceteños de gran nivel: Arturo Tendero, Ángel Aguilar, Rubén Martín, Andrés García Cerdán, en poesía; Eloy Cebrián, Alberto López Aroca y Eduardo Moreno como narradores. Y en cuanto a teatro citaré a Rosa Cantero, autora, entre otras, de la maravillosa obra “Sex Generation” y Llanos Campos, que últimamente ha hecho incursiones muy afortunadas en la literatura infantil.

Y para terminar esta primera fase: una recomendación a los lectores, que seguro leerán esta entrevista.
Les aconsejaría que leyeran la novela “Entrevista con el fantasma”, del rodense Eduardo Moreno, escrita en una prosa que recuerda tanto a Quevedo como a García Pavón.

En esta segunda parte de la entrevista, me gustaría tocar el plano personal, para que te conozcan un poco más tus lectores.

¿Cuándo y dónde escribes?
En una habitación de mi casa donde se ubica la librería, el ordenador y una mesa. Ese es mi lugar de meditación y de escritura. Por otra parte llevo siempre una pequeña libreta donde anoto las ideas que se me ocurren y que pueden servirme para desarrollarlas en poemas, artículos u obras teatrales.

¿Tienes manías a la hora de escribir, como algunos escritores?
Pues no, cada vez soy más natural en ese aspecto. Con el tiempo me he ido despojando de esas manías. 

¿Existe el folio en blanco?
Antes, en mi juventud, el folio en blanco significaba a menudo una angustia. Ahora para nada. 

¿Qué le pedirías a una editorial?
Que publicase mis obras,  jajaja. He de reconocer que he tenido suerte a la hora de que me editen mis libros, de lo cual estoy muy agradecido, tanto a Andrés Trapiello (Comares) como a Miguel Ángel Aguilar (Uno Editorial). 

¿Prefieres ser publicado o autopublicado?
Publicado, aunque no desdeño la autopublicación, pero soy un poco gandul para eso.

Eres un escritor de poesía y teatro ¿Te has planteado escribir sobre otro género?
Escribo también haiku y prosas breves, a medio camino entre la columna de opinión y la carta. Me encantaría, alguna vez, tener la suficiente paciencia y talento como para escribir una novela.

¿A tu juicio, que debe tener un libro para que enganche al lector?
Debe ser entretenido y que en él haya verdad.

¿Cuáles son en tu opinión, los tres libros que no deben faltar en una biblioteca?
Las cosas como fueron, de Eloy Sánchez Rosillo. Drácula, de Bram Stoker. A la intemperie, haikus de Mavi Porras y Juan Francisco Pérez.


Pues hasta aquí la entrevista que hemos mantenido con el escritor Frutos Soriano. Muchas gracias por habernos dedicado estos minutos y esperamos que sirvan para que tus lectores te conozcan mejor. Muchos éxitos con tus obras.


lunes, 15 de agosto de 2016

HOY ENTREVISTA CON ELOY M. CEBRIAN




Eloy Miguel Cebrián Burgos, estamos sin duda ante uno de los escritores más prolíficos y más laureados. Nacido en Albacete en  1963, se licenció en Filología y es profesor en un instituto de Albacete.

 Su actividad literaria abarca la novela para adultos y la narrativa juvenil. Para los jóvenes ha escrito Bajo la fría luz de octubre (Premio Jaén), Bucéfalo, memorias del caballo de Alejandro, Operación Beowulf y ¿Por qué se fastidia todo al cumplir los 17? En cuanto a su producción para adultos, destacan las novelas El fotógrafo que hacía belenes (Premio Francisco Umbral), Los fantasmas de Edimburgo, Madrid, 1605 (escrita en colaboración con Francisco Mendoza), y su continuación, Madrid, 1616. Su última novela es El juego de los muertos, una historia de género fantástico en torno al mundo del espiritismo. Como autor de narrativa breve ha recibido numerosos galardones. Sus relatos se han recogido en los libros Las luciérnagas y 20 cuentos más y Comunión, y figuran en importantes antologías del relato español contemporáneo. Sus colaboraciones semanales en prensa han aparecido recopiladas en los dos volúmenes de La Ley de Murphy. Es, además, traductor literario ocasional y desde el 2000 codirige la revista de creación literaria El Problema de Yorick.
 
Ha sido un detalle el hacerme un hueco entre su labor docente y su actividad literaria para contestar algunas preguntas que, seguro, serán de interés para sus lectores.



¿Dónde vas a buscar tus historias, dónde te inspiras?

R: Es difícil responder a eso. Tendría que buscar la respuesta libro por libro, historia por historia. En general, busco inspiración en la vida, en lo que me rodea, en la experiencia, en la observación, en la memoria. También, por supuesto, en libros leídos, en la prensa, en historias oídas por la radio (escucho mucho la radio) o la televisión. La propia vida y las vidas ajenas están llenas de historias que se pueden convertir en literatura. Parte del aprendizaje del trabajo de escribir consiste en aprender a reconocer una buena historia en potencia cuando uno se la topa. Hay que procurar estar atento para que no se escape ninguna. Un narrador tiene algo de espía.

¿Cómo y dónde se deben de leer tus libros?

R: Uf. Eso depende de cada cual. Bastante trabajo supone atraer a un lector a uno de tus libros como para encima dictarle cómo y cuándo debe leerlo. Los libros no deben venir con folleto de instrucciones. Si acaso, yo recomiendo un lugar cómodo y bien iluminado. El cuarto de baño también puede ser un estupendo lugar de lectura. Tengo un par de libros de artículos que siempre recomiendo dejar junto a la taza del váter, porque la lectura de cada artículo no lleva más de tres o cuatro minutos.

¿Tus historias tienen un trasfondo social? O por el contrario ¿Te gusta crear el fondo de la historia?

R: Depende de lo que se entienda por un trasfondo social. En el caso de “Bajo la fría luz de octubre” sí que había un fondo histórico y social concreto (la ciudad de Albacete en los años de la guerra civil y la posguerra). Lo que está claro es que cualquier historia necesita un escenario bien definido para que resulte verosímil a los lectores. Yo procuro trabajar estos escenarios lo mejor posible. La verosimilitud en literatura está en los detalles.

Tus personajes cobran vida. ¿Te llegan a influir, de alguna manera, en tu vida personal?

R: Mientras escribe, uno nota si los personajes han cobrado vida o si son únicamente un montón de palabras inertes. Si ocurre lo segundo, mal asunto, porque los lectores nunca se identificarán con un personaje al que no has logrado insuflar vida y realidad. En cuanto si han llegado a influir en mí, yo diría más bien lo contrario. Como todos los escritores, construyo a mis personajes con trozos de mí mismo, por lo tanto soy yo quien influyo en ellos, aunque a veces trate de disimularlo a toda costa.

¿Y después del último libro, qué proyectos hay?

R: Siempre hay otros libros en el horizonte. Procuro aprovechar mis períodos vacacionales para emprender proyectos nuevos, como ocurre ahora mismo. Estoy con una nueva novela de intriga, un “thriller” en clave de sátira sobre los concursos de televisión. De paso, he recuperado a algunos personajes de una novela anterior: “El fotógrafo que hacía belenes”. Espero tenerla terminada antes de que acabe el año. Después tengo un proyecto en conjunto con Antonio García Muñoz, el cofundador de El Problema de Yorick, pero es un poco pronto para hablar de eso.

¿Qué novela de las que hay escritas te hubiese gustado escribir y por qué?

R: Como escritor que soy, todos los libros que me apasionan me producen una intensa sensación de envidia, a la vez que una frustración lacerante al pensar que nunca seré capaz de escribir algo tan bueno. Por mi estilo, mi sentido del humor y mi mundo literario, me habría gustado escribir “La conjura de los necios”, de John Kennedy Toole. Sin embargo, Toole no llegó a ver publicado su novela en vida. La frustración lo llevó al suicidio y el libro se publicó más de diez años después de su muerte, por insistencia de su madre. Casi de inmediato, se convirtió en un clásico americano. Así de injusto es el mundo literario.

¿Cómo escritor, cómo ves el panorama literario español?

R: Lo veo mal, difícil. Las editoriales cada vez se arriesgan menos con los nuevos autores y apuestan por libros ajenos a la literatura (¿acaso hacen falta tantos libros de cocina o de autoayuda?). Se va sobre seguro. Se publican muchas obras traducidas que ya han tenido éxito en otros países. O, lo que es peor, libros cuyos autores son rostros célebres de la televisión, ya sea en los telediarios o en los programas de telebasura (el caso de Belén Esteban y su biografía es paradigmático, pero cada vez vemos más novelas firmadas por famosos y famosillos). Todo esto crea un entorno muy hostil para los autores emergentes, que en muchos casos se tienen que conformar con publicar en Amazon, lo que no me parece una buena salida en absoluto. En general, prima lo superficial y lo facilón. Y la falta de calidad es la tónica general. Siempre ha habido literatura de consumo, pero hoy ese tipo de libros barre con todo. ¿Cuándo se ha publicado tanta novela romántica, por ejemplo? Géneros aparte, la calidad de esos libros suele ser execrable. Para más inri, cada libro que tiene éxito genera un aluvión de imitaciones. Todo eso satura el mercado editorial de basura y apenas deja sitio para la calidad y la innovación. La excepción serían las editoriales independientes, como por ejemplo Impedimenta, Salto de Página, Candaya… Pero lo tienen realmente difícil para sobrevivir.


¿Y la situación cultural de Albacete?

R; En Albacete hay muy buenos escritores, sobre todo poetas. Pero cualquiera que quiera hacer una carrera literaria seria, tiene que mirar hacia afuera. A pesar de la facilidad de las comunicaciones y las nuevas tecnologías, vivir en Albacete sigue siendo una desventaja, pues el mundo literario es muy pequeño, y las relaciones personales juegan un papel muy importante. Sin embargo, lo que perdemos por nuestro relativo aislamiento, lo ganamos en tiempo y calidad de vida, por lo que creo que Albacete es una ciudad que te da mucho más de lo que te quita. En cuanto al apoyo de las instituciones a los creadores de la ciudad, me parece escaso o nulo, aunque a estas alturas tampoco esperamos mucho. Un caso muy evidente es la “Primavera cervantina” que ha programado recientemente el ayuntamiento. Varios autores de Albacete hemos escrito y publicado obras relacionadas de una manera muy estrecha con Cervantes (en mi caso, dos novelas). Pues bien, no se contó con nosotros en ninguno de los actos que se organizaron. Lamentable.

Y para terminar esta primera fase: una recomendación a los lectores, que seguro leerán esta entrevista.

R: De momento, la novela que más he disfrutado este verano es “El libro de los Baltimore”, de Jöel Dicker. Bien construida, entretenida, absorbente. En fin, creo que reúne todos los componentes que le pedimos a un libro cuando lo que buscamos es simplemente diversión.


En esta segunda parte de la entrevista, me gustaría tocar el plano personal, para que te conozcan un poco más tus lectores.

¿Cuándo y dónde escribes?

R: Mi momento favorito, cuando las ideas acuden con más facilidad y los dedos parecen volar sobre el teclado, son las mañanas. Por las tardes todo se vuelve más lento, más lánguido. Me refiero al verano, claro. Durante el curso académico, cuando estoy trabajando, tengo que conformarme con las tardes, con los huecos que me deja el trabajo de corrección y de preparación de clases. Nunca escribo de noche.

¿Tienes manías a la hora de escribir, como algunos escritores?

R: Si pedirle a la familia que te dejen tranquilo y que procuren interrumpir lo menos posible es una manía, esa sería la única que tengo.

¿Existe el folio en blanco?

R: Creo que lo del pánico ante el folio en blanco y el bloqueo del escritor son mitos. Un escritor con experiencia y oficio, se sienta y escribe. Sin más. No es posible mantener un nivel de calidad homogéneo, pero nunca me he sentido bloqueado. Si en algún momento no tengo nada que decir, no escribir es siempre una opción, y más cuando hay tantísimas cosas buenas pendientes de leer. Conviene despejar mitos sobre este trabajo. En el fondo no es más que una técnica, una artesanía. Una vez di una charla en Ossa de Montiel, donde se hace mucho encaje de bolillos. Una señora me dijo que le parecía dificilísimo crear una historia y contarla de un modo interesante. Yo le pregunté si hacía encaje de bolillos y ella respondió que sí, que lo hacía desde niña. Le dije que eso me parecía mucho más difícil que escribir.

¿Qué le pedirías a una editorial?

R; Que respondan cuando contactas con ellos, que respeten tus decisiones en el aspecto creativo y que te liquiden los derechos de autor con puntualidad y honradez.

¿Prefieres ser publicado o autopublicado?

R: Publicado, por supuesto. He recurrido también a la autopublicación más o menos encubierta, pero suele ser un callejón sin salida. Sin una infraestructura empresarial detrás, una distribución y cierto grado de promoción, es muy difícil que un libro se conozca.

Eres un escritor de diversos géneros, fantasía, terror, suspense, infantil y juvenil.  ¿Te has planteado escribir sobre otro género?

R: Sí. Tengo en mente escribir una novela de género erótico. Me parece todo un desafío.

¿A tu juicio, qué debe tener un libro para que enganche al lector?

R: No es posible generalizar en este asunto, porque cada lector tiene sus gustos, que dependen de su sensibilidad, de su formación, de su experiencia como lector y de muchos otros factores. Yo procuro, ante todo, que lo que escribo me satisfaga a mí. El lector que tengo en mente a la hora de escribir comparte mis gustos y mi nivel de exigencia. De hecho, el lector que tengo en mente a la hora de escribir soy yo mismo.

¿Cuáles son en tu opinión, los tres libros que no deben faltar en una biblioteca?

R: Un buen diccionario, la edición de los cuentos completos de Borges y (puesto que me das a elegir) una de mis novelas. Por ejemplo, “Los fantasmas de Edimburgo”.

Pues hasta aquí la entrevista que hemos mantenido con el escritor Eloy M. Cebrián. Muchas gracias por habernos dedicado estos minutos y esperamos que sirvan para tus lectores te conozcan mejor. Muchos éxitos con tus obras.



viernes, 12 de agosto de 2016

ENTREVISTA EN LA TRIBUNA DE ALBACETE

Entrevista que publicaba ayer, día 11 de agosto de 2016 el diario La Tribuna de Albacete, realizada por el periodista Antonio Díaz.


lunes, 8 de agosto de 2016

HOY ENTREVISTA CON: Menchu Garcerán

La escritora Menchu Garcerán


Menchu Garcerán es el seudónimo de Carmen Pérez García. Aun no siendo nacida en Albacete, se le puede considerar Albaceteña de pura cepa. Nació en Cartagena y reside en Albacete. Estudió magisterio por la especialidad de Filología hispánica y Francesa.

Actualmente trabaja como Técnico de cultura en la Diputación de Albacete, lo que compagina con a su afición a la escritura.

Amante de la novela romántica y de misterio, ha escrito las siguientes novelas: Infiltrada, Alma, El palacio de invierno, Dos viejos conocidos, la fórmula deseada, La huida de Carol, El viaje del presidente y el último carnaval.


Ha tenido el detalle de hacerme un hueco en su apretada agenda laboral y literaria para contestar algunas preguntas que, seguro, serán de interés para sus lectores.

Hola, Miguel. Muchísimas gracias por contar conmigo para este espacio en tu blog.

¿Dónde vas a buscar tus historias, donde te inspiras?

R: La verdad es que no las busco. Ellas me buscan a mí. La inspiración está en toda en todas partes: la vida, las noticias, una película, una anécdota....

¿Cómo y dónde se deben de leer tus libros?

R: El mejor momento para leer un libro es cuando te apetezca leer, el lugar, en el que uno esté más cómodo y el modo de hacerlo, con la intención de evadirse de la realidad. Mis historias tienen la intención de que el lector pueda desconectar de los problemas cotidianos.


¿Tus historias tienen un trasfondo social? O por el contrario ¿Te gusta crear el fondo de la historia?

R: Todas las historias tienen un trasfondo social. Por ejemplo, en “La fórmula deseada” toco el tema de los enfermos de Parkinson y sus cuidadores, en “La Huida de Carol”, el maltrato psicológico, “Alma” toca la sociedad española de finales del siglo XVIII... Lo hago de manera que esté tan integrado en la historia que las personas que lo leen, no sean conscientes de que lo estoy haciendo.

Tus personajes cobran vida. ¿Te llegan a influir, de alguna manera, en tu vida personal?

R: Siempre. Yo digo que viven conmigo mientras estoy escribiendo la novela, incluso algunos meses después de haberla terminado.

¿Y después del último libro, qué proyectos hay?

R: La primera parte de “Infiltrada” está terminada a la espera de una buena corrección y he comenzado con otra que se desarrolla en Escocia. Todavía no le he encontrado “El punto” y eso que tengo un esquema bastante amplio de lo que quiero. Le sigo dando vueltas y mientras tanto, avanzo en las cosas que ya tengo claras.

¿Qué novela de las que hay escritas te hubiese gustado escribir y por qué?

R: No soy muy dada a pensar en esas cosas pero no me habría importado nada escribir “Guerra y paz”

¿Cómo escritora, cómo ves el panorama literario español?

R: ¿Revuelto? Veo a muchos escritores buscando un lugar en este mundo, mucha gente con ilusión y con ganas de que la lean. Muchas editoriales, precios altos, libros en formato digital... En fin, un panorama que está cambiando a cada momento y al que nos tenemos que adaptar.

¿Y la situación cultural de Albacete?

R: Pues me parece que la vida cultural en Albacete es bastante activa. La gente que viene de fuera se sorprende de que haya tanta oferta en todos los ámbitos.


Y para terminar esta primera fase: una recomendación a los lectores, que seguro leerán esta entrevista.

R: Que disfruten con lo que leen. Para mí, leer es divertirse.



En esta segunda parte de la entrevista, me gustaría tocar el plano personal, para que te conozcan un poco más tus lectores.

¿Cuándo y dónde escribes?

R: Escribo por la tarde, por la noche y durante los fines de semana. El lugar no me condiciona mucho. Durante años he escrito en una cafetería o en el coche mientras esperaba que mis hijos salieran del colegio o de sus actividades. Puedo escribir en la cocina o en casi cualquier lugar. No me molesta el ruido, soy capaz de abstraerme.

¿Tienes manías a la hora de escribir, como algunos escritores?

R: Ninguna. Soy bastante normalita.

¿Existe el folio en blanco?

R: Rotundamente, sí. Ese folio en blanco es un horror, pero si uno no se pone nervioso, suele rellenarse.

¿Qué le pedirías a una editorial?

R: Apoyo incondicional a sus autores. Ya sé que no hay mucho dinero, pero me gustaría que invirtieran más en hacer publicidad a todos. A veces, los lectores ni se enteran de que existen ciertos libros. Decía Umberto Eco que el mundo está lleno de libros preciosos que nadie lee ( o algo parecido) Yo creo que muchos no se leen porque se desconoce su existencia.

¿Prefieres ser publicado o autopublicado?

R: Pues he hecho las dos cosas. Tengo ocho libros publicados con editorial y uno reeditado como autopublicado y las dos son experiencias estupendas. Pueden coexistir sin problema y yo probablemente siga haciéndolo.

Eres una escritora de novela romántica y de suspense. ¿Te has planteado escribir sobre otro género?

R: Si surge la oportunidad, lo haré. Como te decía antes, las historias me buscan, así que todo es posible.


¿A tu juicio, que debe tener un libro para que enganche al lector?

R: Esa es la pregunta del millón. Si lo supiéramos... Lo que pasa es que a cada lector le engancha una cosa diferente.  La temática es tan subjetiva que por eso cada escritor conecta con un tipo de lector distinto. Para mí es imprescindible que esté bien escrito, que resulte ameno, que me meta tanto en la trama que cuando dejo de leer esté deseando llegar a casa para seguir leyendo...

¿Cuáles son en tu opinión, los tres libros que no deben faltar en una biblioteca?

R: Con tres libros no sé si sería suficiente. No me gusta nada elegir. Buscaría algún clásico, algo de realismo, literatura fantástica, por supuesto una novela romántica, una policiaca... Si todos estos elementos los ampliamos a autores españoles y extranjeros, tengo muy difícil escoger tres. Mis gustos van por Pérez Galdós, Víctor Hugo, Tolstoi, Agatha Christie, Nora Roberts... No sé si te has dado cuenta de que elegir no es lo mío jajaja. Seguro que me he dejado autores que me gustan.


Pues hasta aquí la entrevista que hemos mantenido con la escritora Menchu Garcerán. Muchas gracias por habernos dedicado estos minutos y esperamos que sirvan para tus lectores te conozcan mejor. Muchos éxitos con tus novelas.

Gracias a ti.